José Ávila: "El trabajo juvenil es el antídoto de la delincuencia"
El jefe del programa de asuntos penales y carcelarios de la Defensoría del Pueblo, José Ávila, señaló que una de las hipótesis que permitió la reducción de la población joven en las cárceles peruanas, fue la estrategia de promoción juvenil establecida en el gobierno anterior, ya que mediante el empleo tenían una posibilidad de reinsertarse en la sociedad.
“El trabajo juvenil es el antídoto de la delincuencia. Eso está probado”, explicó Ávila, que estuvo como invitado en el programa Paradero Perú, que conduce el periodista Santiago Pedraglio por La MulaTV, para debatir, junto con el sacerdote José Álvarez Calderón, sobre política penitenciaria y la situación de las cárceles en el país.
El representante de la Defensoría del Pueblo se refirió a este tema a propósito del informe que demuestra una clara disminución, entre el 2006 y el 2011, de la población joven (18-24 años) en los penales, de 38% a 16%.
Explicó que entre las causas que generan la delincuencia se encuentran la falta de trabajo, la mala educación, la violencia en la familia y la pobreza y que estos factores afectan principalmente a los jóvenes.
Por esta razón, exhortó a las autoridades del actual gobierno a que extiendan sus propuestas de trabajo juvenil a las cárceles, donde también hay un número considerable de esta población.
“El ministro debe tener sentido de responsabilidad, debe tener un comportamiento ético y ser consciente de esta situación. Si yo capacito a estos jóvenes que están en la cárcel, los estoy reformando”, afirmó.
Mejorar la imagen social de los penales
De otro lado, el experto indicó que el reto de la administración penitenciaria es diseñar estrategias comunicacionales para informar a la ciudadanía sobre los aspectos positivos que existen en las cárceles, ya que, según dijo, educar a la sociedad permite que en un futuro las personas que cumplan sus condenas puedan tener nuevas oportunidades.
"La imagen de los penales que se da a la sociedad es de un lugar sucio, que solo castiga. ¿Es posible que alguien dé un trabajo así?", cuestionó.
“Desde el Estado viene la gran estigmatización, entonces la resocialización nunca va a ser un éxito”, agregó.
Infraestructura penitenciaria
Según Ávila, la cárcel debe brindar seguridad y trato humano.; sin embargo lo primero está fallando debido a la infraestructura vieja que permite, entre otras cosas, la fuga de reos y los conflictos entre pabellones.
Mencionó que es necesario mejorar la inteligencia para combatir la corrupción en los penales. Asimismo, recomendó que el INPE debería tener convenios con la PNP para analizar los puntos riesgosos entre internos y funcionarios.
De igual manera, señaló que se debe aumentar el número de médicos en relación con la población carcelaria.
"En mayo del 2010 hay 56 mil privados de libertad. Ingresan 1000 personas aproximadamente por mes. Las medidas del Estado sobre seguridad ciudadana se reflejan en este incremento. A pesar de que está bien que se tomen medidas, lo que está mal es que el Estado no tome medidas sobre la prevención del delito", explicó.
Finalmente, el experto comentó que estas son medidas básicas, ya que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) solo exige 3 cosas: trato humano, asegurar su salud y alimentación.
Para ver la última edición de Paradero Perú y la entrevista completa a José Ávila y al padre José Álvarez Calderón, entra al siguiente enlace:
'Paradero Perú': Política penitenciaria y posibles soluciones a la crisis carcelaria en el Perú
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